Hasta mediados del siglo XX, las cuerdas de guitarra se componían exclusivamente de tripa para los agudos y cuerdas de seda para los bajos, lo que proporcionaba un rendimiento acústico muy diferente al de las cuerdas modernas.
Las cuerdas agudas de tripa se destacaban por su presencia tonal fuerte, su rápida respuesta y un brillo único, superior al del nailon liso y más cercano al sonido de las cuerdas de fluocarbono. Por otro lado, los bajos, con su calidad vocal característica, eran menos brillantes y con menos sustain que los bajos de nailon actuales, pero ofrecían un sonido más centrado en las frecuencias fundamentales.
Nuestro set Ambra 900 fue creado con el objetivo de recrear el sonido histórico de los bajos de tripa y seda, utilizando materiales sintéticos modernos. Este conjunto está diseñado en un solo grado de tensión y presenta agudos de Supernylgut®, con una textura rectificada que imita las cuerdas de tripa, siguiendo las especificaciones de diámetro que Pujol describió en su “Escuela Razonada de la Guitarra” de 1934. Los bajos, enrollados en cobre plateado sobre un núcleo multifilamento especial llamado 'Rayón', se equilibran entre el metal y el núcleo para emular el sonido y la textura de las cuerdas de seda originales.